Sobre el parking innecesario de un hotel inconveniente en la calle Exarch
En plena crisis del turismo de masas en la época postcovid19, la empresa de telas «Julián López» ha hecho pública la voluntad de cambiar el uso urbanístico de los edificios de próxima construcción en los solares ubicados frente a la iglesia de los Santos Juanes. De ser 50 pisos para familias, pasan a convertirse en un macrohotel y 25 apartamentos turísticos.
Este cambio de uso supone un golpe al tejido social y vecinal de Ciutat Vella que está ya muy deshilachado. De hecho, informes del propio ayuntamiento califican el distrito de “excesivamente terciarizado».
El proyecto de la UE4 (nombre que recibe la actuación urbanística en dichos solares) se ha alargado casi 15 años con constantes modificaciones que cambiaban poco a poco el urbanismo del entorno monumental hasta desconfigurar y dejar irreconocible el trazado histórico de las calles de los Exarch, de los Valeriola y de la Boatella. El trazado histórico se ha perdido. El ayuntamiento, a lo largo de estos 15 años, ha dejado perder el trazado de las calles del barrio del Mercat que tiene un altísimo valor patrimonial.
Además, se pretende la construcción de un parking de 2 plantas, decidido en 2002. Este parking estaba proyectado para dar servicio a las 50 familias que aumentarían la población de Ciudad Vieja.
La movilidad motorizada en el Mercat ha cambiado: se han construido varios aparcamientos en la calle de la Linterna, en la avenida del Oeste, en las inmediaciones de Guillem Sorolla y el gran parking de la plaza de Brujas, con 5 plantas para vehículos . Además, el parking de Parcent podría pasar a dar servicio a los residentes porque se ha remunicipalizado.
Expresamos, pues, todo nuestro apoyo a la opinión del alcalde Joan Ribó que «no tiene sentido» otro parking en el centro de Ciutat Vella y que hay que revisar el proyecto. Si la apuesta municipal es la de una Valencia más sostenible y verde, es incoherente e innecesario otro aparcamiento subterráneo.